viernes, 6 de septiembre de 2013

Comentarios de cine: Star Trek: En la oscuridad

Hace apenas unos días comentaba un lector en La Cueva, refiriéndose a la última película de la trilogía de Christopher Nolan sobre Batman, que hay un cine sólo para divertir y que no hay que esperar de éste más de lo que promete. Respondía a mi artículo sobre La leyenda renace en la que manifesté que no me había gustado. Y comparto lo que dijo. Por supuesto, hay un cine puramente de entretenimiento y otro con más pretensiones. En uno predomina el espectáculo, en otro, las reflexiones de carácter existencial o referidas a todo tipo de conflictos humanos. Los dos «géneros», por hablar de alguna manera, enriquecen el cine, pero mi impresión es que el predominio de las películas de acción —por las que apuestan con mayor frecuencia las productoras— es un signo de que las grandes narraciones languidecen. Al menos, si los efectos especiales son el alma de una película, lo que yo le pido a ésta es que se parezca más a Star Trek: En la oscuridad que por ejemplo a Jungla de cristal 5. La primera es una portentosa exhibición audiovisual, la segunda, una película mala para ver y a continuación desechar. Pero de Star Trek (versión 2013), sin ser una maravilla, puedo decir que además de sorprenderme me ha regalado dos horas de verdadero regocijo. 

      Nada conocía de la saga Star Trek antes de ver esta película, salvo que es considerada una obra de culto de la ciencia ficción. Por este motivo, por fortuna o por desgracia, he disfrutado de la misma sin las suspicacias propias de un seguidor fiel a esta dinastía cinematográfica, de las que no he podido librarme en cambio con películas como por ejemplo Espediente X, y algunas otras. Y lo que he encontrado aquí ha sido una gran película futurista, un guión decente que me ha dejado con ganas de más, unos efectos especiales espectaculares y unas interpretaciones sobresalientes. Destacan todos los actores con cierto peso en la historia, desde Zoe Saldana a Chris Pine, pero el talento a capazos lo ponen dos estrellas en ciernes del celuloide: Zachary Quinto y Benedict Cumberbatch. Los dos enormes, aunque quien me entusiasma especialmente es Cumberbatch, el actor británico que me dejó alucinado encarnando al mítico personaje de Sherlock Holmes en la serie homónima de la BBC. 

      La película en sí, de argumento facilón, en realidad da cierto juego. La nave Enterprise tiene que hacer frente a una amenaza sobre la tierra que compromete a la cúpula de la propia Federación. Para solventar esta crisis, el capitán Kirk encabeza una expedición a un planeta en guerra para capturar al responsable del ataque contra el gobierno terrestre. Khan es un enemigo poderoso que medirá la capacidad heroica de los protagonistas del film. Lo interesante, mirando más allá del estético alboroto de la puesta en escena, es ver cómo las relaciones se tensan cuando está en juego la supervivencia de la tripulación. Este juego de amistades, lealtades y deber profesional se entrevera en esta aventura añadiendo dosis dramáticas a una historia que parece que no puede aportar nada más que porrazos, disparos láser y mucho ruido. 

  Pero de eso nada. Star Trek: En la oscuridad, como obra independiente, es una película muy digna y muy bien hecha. Ni siquiera desentona el director, que me parece un tipo sobrevalorado. J. J. Abrams destaca más cuando sólo dirige los proyectos y deja en manos de otros el guión, y aquí hace un trabajo impecable ajustándose a las necesidades del género. En cualquier caso, no voy a escribir ningún análisis de la película ni tampoco voy a señalar sus carencias, pues da diversión suficiente, y ésta es tan bien repartida, que no me apetece.

        Sí diré no obstante dos cosas que no me puedo guardar. La primera, el carácter de aventura que respira la película, cuyos héroes se salen del argumento en diversos momentos del metraje, quizá con tierna inocencia pero remolcados por fraternales afectos. Por otro lado, su condición de aventura pura hace de esta película una experiencia muy excitante para el espectador, pues transporta al público a un escenario de fantasía y lo sitúa a la cabeza de un grupo de grandes hombres cuyo objetivo es explorar las fronteras del universo conocido. Quizá esto sea lo que más ha despertado mi entusiasmo, el deseo de hallar lo desconocido, la necesidad de conocer quiénes somos, de dónde venimos y adónde vamos. Pues en el fondo, lo reconozcamos o no, la vida es una aventura en la que el hombre se dispone a encontrar a Dios.





1 comentario:

  1. Yo no vi esta,vi la anterior y me parecio bastante buena, el guion un poco flojo pero muy bien hecha, se busco relanzar la serie sobre la base de cambiar el pasado y por tanto el caracter de algunos personajes, esto porque venian de varios fracasos de taquilla, las peliculas no tenian en mi opinion las ventajas de las series,como mantener la tension con capitulos unitarios, para mi en esta nueva saga se valora nuevamente uno de principales ganchos de la franquicia bien explotado en la serie clasica q son los conflictos interpersonales de los personajes, y se introduce mucha mas accion con unos efectos muy bien hechos y buenos actores. se puede argumentar que es una franquicia muy influenciada por la taquilla y el rating dando volantazos en los guiones pero en suma me parece una ficcion entretenida, no solo para los niños, un saludo.

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